Tras la fuerte irrupción que tuvieron los NFTs en 2021, siguen con buen ritmo este 2022 pese a los momentos complicados del mercado cripto. Según NFTGO el Market Cap del mercado de NFTs es de casi 17B$, a fecha de publicar este artículo, tal y como se puede observar en el siguiente gráfico.
Fuente: NFTGO
Si no fuera porque estamos en el mundo Blockchain, sería razonable deducir que es una tecnología bastante madura con poco recorrido de mejora. Sin embargo, esto está lejos de la realidad. Los NFT, como cualquier otra tecnología, pueden mejorarse para convertirse en versiones mejores de sí mismas.
Esto es precisamente lo que está sucediendo cuando los NFT 1.0 (CryptoPunks, Bored Apes, y muchas otras iniciativas de NFT que eran simples PFP) dejan paso al desarrollo de las NFT 2.0 con mucha más utilidad y beneficios para el holder.
Un NFT de 1ª generación (NFT 1.0) tiene varias características: una gran colección (normalmente 10.000 o menos) de imágenes generadas aleatoriamente y diseñadas para funcionar como fotos de perfil, cuya acuñación (minteo) tiene un coste en criptomonedas en forma de fees, y muchas veces nada despreciables, especialmente en la red de Ethereum, que estaban a menudo en el rango de 0,05 – 0,1 ETH, y el coste de salida de la colección de NFTS. Por norma, la estrategia óptima suele basarse por mintear 2-3 unidades de un proyecto. De esta manera, si el proyecto tiene éxito y el precio sube, es posible vender una unidad para obtener beneficios y mantener el resto con el objetivo de sacar más beneficios futuros habiendo minimizando riesgos. Cómo siempre destacar que nada de esto constituye consejos de inversión. Los proyectos de 1ª generación suelen ofrecer poca utilidad más allá del acceso exclusivo del titular.
Esto puede conllevar a varios resultados indeseables para los proyectos:
- Los usuarios minoristas sólo pueden participar en unos pocos proyectos a la vez debido al coste de entrada (coste NFT+fees), además de generar una “guerra” por obtener los NFTs con el precio más bajo (precio suelo).
- La acuñación sin restricciones o las whitelists con posibilidad de compra múltiple, pueden conllevar a la creación de ballenas y por ende el tamaño de la comunidad.
- El pago por adelantado para la acuñación facilita la estafa (minteos falso de NFTs)
- La única forma de obtener liquidez es vender tus NFTs
- La especulación impulsa de forma abrumadora el precio de los activos del proyecto
Esta es la historia de los proyectos NFT 1.0. Después del FOMO inicial, los interesados y entendidos en este sector se cansaron de la perspectiva de dar su dinero a un sinfín de proyectos poco imaginativos, sin utilidad, ni previsión de futuro, y generando un escenario ideal para la disrupción.
Vale, pero ¿qué ha cambiado de con la llegada de los NFT2.0? Un proyecto de NFT de 2ª generación se caracteriza por la acuñación gratuita (en ocasiones un poco de tiempo y la resolución de algunos rompecabezas), fuertes incentivos para los titulares, un ecosistema simbiótico de NFT y la utilidad del proyecto.
Los proyectos NFT de segunda generación muestran hasta ahora algunas características en común:
- Acuñación libre – el precio del activo va más ligado con la calidad del proyecto.
- NFT secundarios – subproyectos simbióticos accesibles sólo por los titulares de los NFT génesis.
- Generación de liquidez – es posible usar esos NFTs para generar pasivos o para pedir préstamos dejándolos como colateral
- Evolucionables – los NFTs pueden ir cambiando dependiendo de diferentes factores
- Equipos del proyecto altamente competentes – el proyecto es el que debe de generar el valor, por tanto, se requieren equipos que puedan aportar valor y cumplir las etapas del roadmap.
Cómo en la mayoría de las nuevas versiones, la 2.0 puede hacer lo mismo que la 1.0 pero muchas más, y en esta ocasión no iba a ser diferente. Ha continuación expongo las principales características y funcionalidades que hacen diferencial al NFT2.0:
· Extensibilidad – Un NFT extensible o interconectable significa que debe ser capaz de conectarse a otros NFT o proyectos de una manera significativa/útil.
o Un NFT puede vincularse a otro NFT y viceversa.
o Los token fungibles pueden ser contenidos por un NFT.
o Un NFT puede estar conectado a cualquier otro conjunto de datos.
· Capacidad de actualización – Esta característica garantiza que un NFT pueda ser modificado en el futuro. Las ilustraciones, los metadatos y los recursos adicionales (que tendrán sentido en la sección de habilidades) son ejemplos de carácter´siticas actualizables.
· Dinamismo – Da a los NFT la capacidad de hacer más de lo que pueden hacer ahora. Pueden enviar órdenes, equipar a otros NFT, modificar su aspecto y mucho más, según las preferencias del creador o del propietario.
Cuando se combinan estos tres rasgos, se crean NFT que van mucho más allá de todo lo que se ha visto antes. Veamos algunas implementaciones de NFT 2.0 para ayudarte a comprenderlo mejor.
· NFTs anidados: Los NFT pueden incluir y ser incluidos por otros NFT, gracias a su capacidad de anidamiento. Aunque esta noción parece fácil a primera vista, las nuevas opciones que ofrece a los diseñadores son impresionantes (de arte y tecnología). Proyectos como RMRK permite anidamientos ilimitados, de modo que un NFT puede contener otro NFT, este contener otro NFT, este contener otro NFT, y así hasta el infinito. Los juegos, el arte, el metaverso, las exposiciones y mucho más pueden beneficiarse de esta funcionalidad ay que permitirá equipar un NFT con nuevas características sumando las de otro activo.
· NFTs con multiples recursos – En los NFT 1.0 sólo se asociaba un único recurso de media (imagen, vídeo u otros medios) al token. Esto significa que el token sólo podía asociarse a un formato. Independientemente de dónde se vea el NFT, a todo el mundo le parecerá lo mismo. Pero los NFT 2.0 no tienen que estar condenados a un único destino para el resto de sus vidas. Ahora es posible que disponga de un abanico de recursos y el titular puede elegir cuál mostrar. Sin embargo, este no es el único uso de esta característica. Por ejemplo, un NFT de un libro puede tener tres tipos de recursos diferentes: un pdf, un audiolibro y una portada en jpeg.
Estos recursos pueden configurarse para que sólo se carguen cuando el usuario interactúe con el NFT en la plataforma en cuestión. Si está usando un lector de libros, verá el pdf; si está usando un reproductor de audio, lo escuchará.
· NFTs dinámicos – Proyectos como Freeverse permiten crear lo que denominan “activos vivos”, que son NFT que pueden evolucionar y cambiar en función de múltiples factores, lo que permite un aumento sin precedentes de la participación, mucho más allá de los coleccionables. Estos factores pueden ser conectados con el mundo real a través de oráculos como por ejemplo los de Chainlink. Por ejemplo, una carta NFT de un jugador de fútbol puede incluir estadísticas de rendimiento como los goles marcados y al estar conectada al mundo real podría actualizar automáticamente sus estadísticas en respuesta al rendimiento del jugador en vivo. Los proyectos de NFT podrían incluso acuñar automáticamente, en tiempo real, nuevas cartas de NFT cuando un jugador alcanzara un determinado hito, como un determinado número de hat tricks completados. Este comportamiento dinámico supondría un paso evolutivo en la forma de crear y comercializar activos únicos.
· NFT de copropiedad (DAO): Los NFT 1.0 permitían que los activos fueran propiedad de una sola entidad. Sin embargo, con los NFT 2.0, varios propietarios pueden colaborar y poseer una participación en el NFT y por tanto poder acceder a la compra en forma cooperativa una parte del activo subyacente con menor poder adquisitivo. Una vez completada la compra conjunta, el NFT puede disponer de tokens anidados, que se distribuirán entre los coleccionistas en función del tamaño de su inversión, permitiendo a los propietarios votar en las futuras decisiones sobre el activo. Una vez más, se trata de un concepto con muchas más aplicaciones que su explicación básica.
· Modelo de alquiler de NFT: Un NFT 2.0 va más allá de la mera propiedad y permite a los coleccionistas alquilar el activo subyacente a través de contratos inteligentes a otras personas. Dado que el alquiler de un activo genera un ingreso pasivo para el propietario, este modelo mejora la liquidez en un mercado que, de otro modo, sería ilíquido. (Los propietarios de NFT tienden a conservar sus tokens durante mucho tiempo bajo la creencia de que su valor aumentará con el tiempo, limitando así el flujo de divisas).
· NFTs reactivas o responsivas: El renderizado condicional para los recursos de los NFT habilita la capacidad de poder cambiar el aspecto en función del cumplimiento de unos criterios determinados. Por ejemplo, dependiendo de la hora del día, el recurso de un NFT de un paisaje cambia entre dos versiones (nocturna y diurna). Para que esto funcione, la NFT necesita dos recursos (en este caso, fotos) y criterios para priorizar uno sobre el otro.
· NFTs inteligentes – Los NFTs 1.0 ya usan Smart Contracts para poder ejecutar acciones dependiendo de ciertas condiciones (p.e. programar regalías para los creadores en cada transacción), pero se puede ir más allá. El proyecto Alethea AI está creando una nueva serie NFTs de avatares está envolviendolos con una IA que los anima, dotándolos de habilidades de conversación y conocimientos. Es lo que denomina la empresa “vaina” o el “alma” del avatar. A continuación, estos NFT inteligentes, o iNFT, se convierten en algo así como chatbots que pueden poseerse, entrenarse o venderse.
Las NFT ya han calado hondo en la psique de los usuarios. La aparición del desarrollo de las NFT 2.0 abre las puertas de un nuevo mundo de posibilidades y casos de uso inexplorados para beneficio de los usuarios. Y lo mejor es que esto sólo ha hecho que comenzar